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de seguros
La sociedad española debería ahorrar 14 billones de euros para estar protegida si no existiese la industria del seguro. Así lo indica el último estudio de Fundación Mapfre, Balance socioeconómico de una industria necesaria, que ha elaborado Analistas Financieros Internacionales (AFI).
El documento señala que si los ciudadanos tuvieran que ahorrar esa cantidad de dinero se “reduciría drásticamente el bienestar de la sociedad y su capacidad de consumo, con el consiguiente empobrecimiento económico”. Así, se refleja que el seguro tiene un papel cada vez más importante en la economía ya que además de generar empleo y riqueza cumple una función preventiva.
Cada hogar gasta al año una media de 1.800 euros en sus seguros, una cifra que según el estudio está por debajo del nivel óptimo, que se situaría en los 4.800 euros anuales. Por lo tanto, “los españoles deberíamos intensificar las coberturas que tenemos contratadas en seguros personales, de Vida y de Salud”.
El ahorro y las pensiones
El seguro ayuda, según el texto, a la sostenibilidad del sistema público de pensiones con fórmulas complementarias, como ya lo hace en otros países del entorno. Queda mucho camino por recorrer en este sentido, ya que por ejemplo, en Reino Unido, los seguros y Planes de Pensiones alcanzan el 150% del PIB y la mitad del ahorro financiero, y en España sólo suponen el 22% del PIB y la octava parte del ahorro del país.
El seguro y el empleo
El sector asegurador proporciona en España alrededor de 350.000 puestos de trabajo, entre directos e indirectos. Esta industria emplea directamente a 48.000 personas, y genera 150.000 puestos indirectos (red comercial, talleres, clínicas...) a la vez que mantiene otros 156.000 gracias al consumo y a la las necesidades que tienen los sectores relacionados con la industria aseguradora.
El sector asegurador y su inversión institucional
Sin embargo, el empleo y el ahorro no son las únicas contribuciones al crecimiento económico español. El sectoraporta cerca de 8 millones de euros a las arcas públicas a través de cotizaciones a la Seguridad Social, IRPF, impuesto de sociedades e impuesto sobre las primas de seguros. Para hacerse una idea de la aportación, los impuestos especiales del tabaco recaudan 7.100 millones y el de los hidrocarburos 10.362 millones de euros, lo que sitúa a la industria aseguradora entre ambas.